Si un contacto ha rebotado, queda total y permanentemente bloqueado.
Esto significa que nunca se podrá volver a contactar con ese contacto. Se produce un bloqueo permanente si, por ejemplo:
- La dirección de email es incorrecta, ya sea porque hay un error tipográfico o porque el destinatario ha eliminado esta dirección de correo electrónico.
- Algo va mal con el dominio (lo que hay detrás de la @) - de nuevo, un error tipográfico puede ser la causa.
- El correo electrónico se rechaza por sospecha de spam.
- El dominio remitente se rechaza por mala reputación.
Si escribieras a contactos que ya están bloqueados, esto significaría una reputación negativa. Es mucho más probable que los correos sean rechazados como spam y dejen de llegar a las bandejas de entrada de tus destinatarios, una circunstancia que conviene evitar.